domingo, 20 de octubre de 2013

HISTORIAS SOBRE SAVINA- FINAL: RECUENTO REENCUENTROS

Aún tengo las maletas
que llevan tu nombre marcado
en el camino difuminado
que fueron dejando sus ruedas.
Las princesas con insomnio
entre noches diarias
con olor a madera,
las lunas sin cristal
que mueren de frío
por el sol de primavera.

En charcas dibujando fronteras
yo sequé mis palabras,
y empapé a fuego mis lágrimas
con botellas enteras.
Por volverme a sentir el primero
descuidé mis modales,
la sal y las mentiras
prendieron en la leña,
me prendé de tus marcas
de luz de Madrid
y de tu sangre extremeña.

Y entre mares, verdades a medias
y cuentos entre tus medias
que en mi mente claudican,
recordé perder nuestros recuerdos
jugando a las canicas.

Resfrié entre tus besos
las cosas que nunca existieron,
los veranos que tanto reían
en inviernos se fundieron.
Diez minutos más
para las campanas sirenas
que jamás se olvidaron
que las mejores historias
las escribió un ladrón
al que siempre robaron.

Y recuento reencuentros
basados en tu cuerpo
de agosto en quincena,
si me llaman de fuera
no cuentes que cuento
las horas en tu melena.

Hoy te escribo
con afán de tu voz,
con amor por tus calles,
con deseos de no desear
más que un beso permanente
sin saber a qué sabe.

Y que conozcas
a mi particular enfermera
que solo por curar
se fuga con las estrellas,
ella limpia mis borrones de tinta
con ideas de cera,
pertenece a la misma quinta
de las promesas y las dudas,
bebe chupitos de ron
con cometas y espuma,
se acomoda en rincones
donde expande sueños
con toda su holgura.
Ella solo tiene un nombre
y se llama locura.

Y recuento reencuentros extasiados
por ir a pie entre tus piernas,
me quedaré sentado en la acera
donde una vez tumbaste tus sentimientos
sin importar la espera…
Si me llaman de fuera
no cuentes que aún cuento
las horas por tu cuerpo,
viviré de silencios guardados
en mi voz al descubierto.

Gioseer





martes, 1 de octubre de 2013

HISTORIES ABOUT K-GIRL- FINAL: SEIS

No hace falta más de un segundo en tu mirada para darse cuenta de que devora… tanto que la mía muerde. El espacio reducido de tu habitación no podrá abarcar algo tan grande como lo que va a ocurrir ahora. Y es que se acabaron los razonamientos y vence el instinto con solo sentir el perfume de tu piel a unos centímetros de separación...y el aliento empieza a convertirse en el mejor de los mensajes.

Mi boca se acelera hasta rozar la tuya y mis manos se envenenan con el afán de sentirte. Cada uno de mis dedos borda todo tramo de tus brazos, como un sastre dispuesto a hacerte el amor a medida. Mis labios chocan con  los tuyos y ya no hay vuelta a atrás… te aprieto contra mí, haciéndome dueño incontestable de tu cintura… me atas con tus manos por mi cuello, aprietas tu pecho con mi pecho…  la gravedad empieza a volverse cero, tanto que mis brazos te levantan en el aire… tu vestido ya sobra, por eso se remanga… somos un ciclón a punto de estallar contra la puerta que cae golpeada por un tsunami de deseo y la corrala de vecinos se convierte en el escenario improvisado.  Destrozo la cremallera de tu vestido con los dientes, ya no hay ropa que moleste, no hay luces que distraigan, solo mi boca rodeando tu cuello, tu espalda… llegando a sitios donde perderse sin remedio. Esta noche somos presas  de una fuerza animal que nadie podría entender… por eso tu pelo es agarrado con fuerza por mi mano, mientras aúllas como una loba que ha perdido a su manada… tus manos se acaban rindiendo sobre una de las barandillas, el sudor escurre como actor secundario por nuestros cuerpos… desde atrás tatúo mi cuerpo sobre el tuyo, me encuentro tan dentro de ti que ya no sabría cómo salir… aunque tampoco quiero.

Hay luces vagas que se empiezan a encender, hemos despertado a algunos vecinos… la verdad es que me da bastante igual, no creo que nadie nos pueda frenar ya. Te vuelvo a tener de frente y te levanto con fuerza, esta vez tu espalda visita la puerta del ascensor… tu voz incrementa sus gemidos, la fuerza se acaba de convertir en nuestra mejor cualidad… tus ojos están ya de visita en otra galaxia y tienes la luna en tu paladar… tus uñas dejan un recuerdo imborrable sobre mi espalda… gritas y los vecinos no paran de llamar… 1, 2, 3… 6 denuncias por escándalo público, tantas como orgasmos acabas de vivir.
Podría parecer que todo acaba... pero no, la noche sigue con su telón abierto (and you know,“the grass is always greener”)

Y tú vuelves desnuda
a abalanzarte sobre mí,
y el suelo ofrece a mi espalda
ser parte de su tapiz,
y la loba se vuelve fiera
y cabalgas a más de mil,
tú pecho es el culpable
de la hipnosis de mis manos,
tus dientes emanan crímenes
con rastros de carmín,
en el centro de tus piernas
he dejado de existir
y el final de tu espalda
es el comienzo de mi fin.
Vuelven los gritos,
el pulso se vuelve a acelerar,
has perdido la cuenta,
lo vuelves a gritar:

1,2,3… 6. Seis.

Gioseer