HISTORIAS SOBRE ELIA- FINAL: LA HABITACIÓN

Y de repente me veo sentado en esta sala, con mis manos sobre la cara, como queriendo causar algún tipo de atracción imantada que saque de mi mente todo lo que pudo ser y nunca fue... y nunca será. Estoy en esa habitación donde acabé imaginando que te quedarías, donde nunca volviste a estar…

Los momentos golpean fuertemente la ventana, como una puta tormenta de verano, dejando pequeños cristales con los que he ido sangrando poco a poco.

Creo que hemos sido un experimento de esas probetas de laboratorio, donde se mezclan dos reacciones y acaba saliendo mal… rompiéndose la probeta en apenas unos instantes.

Siento que no hayas sido la que pensaba… siento no haber sido como alguna vez imaginabas…

De repente me di cuenta que si quería olvidar todo solo debía mirar mejor en ti… en tus reacciones, en tu sitio que nunca abandonaste, en todas esas cosas que jamás vi, cegado por una aparente especialidad del momento, en un tiempo donde todo parecía ser… solo en mi cabeza.

Debía estar loco… debo estarlo. Pero se acabó…. ahora dejaré de autoengañarme, de buscar excusas para no afrontar la realidad, de ver que realmente lo imposible es solo equivocado…

Porque si esto fuera una contienda, solo habría un contrincante… yo mismo, el que cayó más allá de lo que no debió pasar de un simple “qué tal”, el que nadó a contracorriente sin saber en qué punto iba a naufragar… pero naufragar, al fin y al cabo.

Se acabó… y me doy cuenta porque en esta  habitación no hay nadie, solo yo.

Porque no hay más genios de lámpara

ni detalles que se escapan,

no quedan más desvelos

ni madrugadas ahogadas

en devaneos, en deseos,

en fugaces instantes de quizás…

Porque mueren sentimientos prematuros,

imágenes contenidas de retina,

pensamientos derribados bajo muros,

caricias de saldo mal vendidas,

besos que saben a despedidas.

Porque no hay París bajo tu falda,

no hay viaje ni sustento

de deseos que perdieron sus alas

al caer más allá de tu cuerpo.

Porque siempre es nunca

y nunca es siempre…

Qué paradoja,

qué equivocación…

se empapa de tormenta

esta habitación…

Gioseer

HISTORIAS SOBRE ELIA- ANTAGONÍA

Qué pronto cambian los cuentos

en apenas segundos,

mire usted a Don Quijote

que en apenas momentos

pasó de héroe a zote.

Como pronto varían tus palabras

con las que ya no hipnotizas,

solamente descalabras,

tú siempre llegas tarde…

Pero no hay que alarmarse

pues soy todo un gurú

que el olvido practica

casi sin descuidarse.

Un par de noches

de cielo color cerveza

sacan de mi cabeza

tus caprichos de sable.

Y si no sale todo,

tengo ese fiel apoyo

de mi amiga Ginebra,

esa que con un par de hielos

siempre se pone a tono.

Ya empiezo a no extrañarte, nena,

una rueda pinchada

siempre sale de un bache,

aprende tú también que la luna

no habla cuando tú quieras

sino cuando se suelta

en sentimientos confesables.

Hoy ya no podrán dañarme

tus besos de camuflaje

y caricias de contrabando,

yo abandono esta guerra

donde solo hubo un bando.

Pobres son tus reacciones

carentes de sensaciones,

tus excusas son todo un plantel

de viandantes sin pies,

hoy no pongas mantel

que en casa no comeré.

Mandaré a tu buzón

aviones de papel

con una única arenga

y discurso meditado:

No hay amores imposibles,

solamente equivocados.

Gioseer

HISTORIAS SOBRE ELIA- BALADA IMPROVISADA DE TROMPETA

Susurran despacito

las trompetas sin aire

que quieren gritar conmigo

lo que aún no está escrito...

Sé que te gusta cómo suena

si me lanzo a improvisar,

porque cada palabra es lanzada

directa y sin pensar,

y así, de esta manera,

puedo de una vez por todas confesar

que te quiero,

aunque lo quiera callar,

que me mata tu cara

cuando espera una respuesta

y tus ojos brillando

como cielo sin manchar,

que amo tu manera de caminar,

tu sonrisa incontenida

con ganas de ser la reina

de esta historia sin final.

Retumban las trompetas,

cada vez con más fuerza,

y más...

Y más me lanzo a las vías

de tu cuerpo indescifrable

a toda velocidad,

sin importar las consecuencias

ni estaciones por contar,

yo quiero ser comienzo,

destino y viaje contigo,

no importa si aquí o allá,

ni si la conciencia del universo

algún día me podrá perdonar.

Balada improvisada de trompeta,

que ahora acompaña a mi voz

y ya solo puedo gritar...

Gritar que eres de entre tantas

la perfecta,

que en ti no dejo de pensar

aunque disimule con huidas

estas ganas de besarte

a cada segundo, a cada instante,

siento que se hace tarde,

siento que voy a amarte...

Suenan las trompetas,

gritan las trompetas,

duerme mi silencio,

escucha, mi amor....

Gioseer

HISTORIAS SOBRE ELIA- CADA VEZ QUE TE PIERDO

Cada vez que te pierdo

siento que me hundo un poco más.

que voy volando hacia un abismo

sin alas ni cinturón de seguridad.

Cada vez que te pierdo

me pregunto por qué yo,

me pregunto si cada palmo de mi mano

ya tu cuerpo lo olvidó.

Y así, sin saber más

que lo que nunca sé,

me pierdo entre tus fotos

con intención de perder,

o de perderme….

Cada vez que te pierdo

ya no busco más motivos,

solo te busco a ti…

Van asomándose a las dudas

miradas que se mueren sin tu piel,

hay moradas que se vuelven callejones

si no te encuentro yo al volver,

azules que se vuelven marrones

como otoños que navegan por mis pies.

Porque cada vez que te pierdo

te espero por si regresas,

que tengo miles de caricias

gritando para que vuelvas

y así me puedas conocer….

Gioseer

Foto de anaballesterosp

HISTORIAS SOBRE NORMA- EN CRUZ

Resbalan mis deseos

por tus ácidos suspiros

que marcan un solo ritmo

por tu espalda y al compás.

Si me matas que sea tarde

y si me salvas, boca a boca,

no te separes demasiado

que yo quiero respirarte.

En cruz,

amanece en tus manos mi cuerpo,

y por tus labios me sumerjo

hasta llegar a naufragar.

Vas a ahogarme sin remedio,

el calor aquí es el dueño

de esporádicos sueños

donde me haces trasnochar.

Ay preciosa,

juro que cada parte de tu forma

poco a poco me destroza,

con tu pecho haciendo mecha

con mi pecho, a punto de detonar.

En cruz,

y sin apenas inmutarme,

sé que voy a amarte por momentos,

esos en los que estoy dentro

de tu vida al despertar.

En cruz,

aquí me dejas,

caprichosa y consentida,

dueña de ese refrán:

Carpe Diem, vive la vida,

que mañana se verá.

Gioseer

HISTORIAS SOBRE NORMA- BENDITA

Ya tengo algo

en lo que creer,

tú, la virtud salvaje

donde perder mi fe.

Yo rezo a tu  cuerpo

y confieso ser preso

de tu libertad,

esa que juzga al destino

y no cree en el jamás.

Bendita tu risa

que gana en la nada,

bendita tu prisa

que viene por mí,

bendito el momento

que estoy junto a ti,

maldigo ese tiempo

que corre sin fin.

Me pierdo en tu boca

e imploro clemencia,

eterna inconsciencia

de fuego celeste

llevado al infierno

por nuestra emoción.

Y si existe un milagro

son tus manos viajando

enlazadas a las mías,

y si existe oración

son tus labios plasmando

nuestra devoción.

Bendita tu risa

que gana en la nada,

bendita tu prisa

que corre por mí,

bendito el momento

que estoy junto a ti,

maldigo ese tiempo

que corre sin fin.

Y entre la prisa

y tus brazos

me quedo a dormir,

así es nuestra vida,

y si el cielo lo entiende,

que Dios nos bendiga.

Gioseer

Foto de JC Ballís

HISTORIAS SOBRE ELIA- LA MÁS REAL DE LAS EXCUSAS

Estoy desvestido con esos caminos interrogantes,

en los que uno no sabe si es mejor salir

o entrar en ellos, con el único afán

de seguir hacia adelante.

Dejaré de ser tan descarado

y pondré las excusas que el sol quiera,

si te encuentro en la acera

yo solo me daré la vuelta

y fingiré no haberte mirado.

Siempre vivo entre dos noches

(Ya sabes que soy algo bipolar):

en unas me arropo con tu nombre,

en las otras me dedico a olvidarte.

Lamento mucho decir que mis ojos se apagan

por no tener el calor de los tuyos,

pero no existe otra realidad

que la que vivo día a día…

Tu sonrisa parecía diferente.

Qué ingenua es la ingenuidad

que aún no sabe porqué la definen así,

qué ingenuo he sido yo

por haber llegado hasta aquí

sin saber más que la ingenuidad  sabe de ti.

Romperé los besos que tenía imaginados,

borraré los versos que salen al verte reír,

cubriré mi alma con todo ese montón de papeles

por si quiere volver a dormir.

Pero, si en algún momento,

el silencio me pregunta qué razón

me llevó hasta a ti,

le pondré la más real de las excusas:

Que te quiero.

Gioseer